El gobierno de Leandra Xicoténcatl es una burla para Mazatecochco
El Petardo/ La opinión de Valentín Lima
Desde que tomó protesta Leandra Xicohtencatl sabia que la voluntad de los ciudadanos era negativa, pues en las urnas eligieron a Mario Quixtiano.
Solo en la practica la improvisada alcaldesa fue asesorada por gente externa para impugnar el triunfo del perredista y desde los tribunales se decidió que el PRI gobernara por tres años Mazatecochco.
Palabras más, palabras menos, el caso es que la ridícula alcaldes lleva ocho meses en el cargo y no se ve para cuando se ponga a trabajar enserio a favor de los ciudadanos.
La presidencia está cerrada y tampoco hay fecha para cuándo será liberada, no es necesario ser autoridad para que los ciudadanos se den cuenta que hay ingobernabilidad.
El proyecto fracasado del priismo en esa región está peor cada día y es que gente cercana a la actual administración informó que la entrega de cuentas públicas esta atrasada y que es larguísima la lista de observaciones por lo que se augura daño patrimonial.
Lo anterior se confirmará cuando la Comisión de Finanzas y Fiscalización del Congreso del Estado hagan públicos los dictámenes de cada ayuntamiento y de la manera en la que aplicaron los recursos públicos.
Los grupos políticos que mantienen una disputa por el poder encabezados por la alcaldesa de oportunidad Leandra Xicoténcatl no se han percatado que los ciudadanos ya se hartaron del show y de la pésima administración pública, lo malo es que el salario de la representante popular y de los burocratas se paga con las contribuciones de las verdaderas familias que trabajan y no viven de la política.
La buena imagen que fue creada por administraciones pasada hoy esta opaca por el capricho de una administración ridícula que no promete un buen futuro para la región.
Incluso una de las fechas más emblemáticas para Mazatecochco es el carnaval, pero con todo el circo que se traen los priistas contra con los inconformes la imagen de este municipio ha quedado en los suelos, no hubo turismo, ni tampoco el tan esperado evento que atrae la mirada de propios y foráneos.
No hay fecha para que vuelva a renacer el poblado cobijado por las faldas de La Malinche.