Este domingo el presidente de la comunidad de San Pedro, Pascual Romero, rindió un informe de las actividades que se han desarrollado durante los dos años de gestión; este fue obligado por los pobladores luego de que sellaran las puertas de la presidencia con soldadura.
En el acto se nombró a una comisión de hacienda que se encargaría de verificar cada uno de los gastos a ejecutarse mediante el techo financiero designados a este barrio.
La reunión transcurrió en un ambiente tenso, pero al paso del tiempo los ánimos se fueron calentando, y hubo quienes argumentaron, “hay pruebas suficientes de un desvío de recursos”. Sin embargo, esto último le corresponderá investigarlo el Órgano de Fiscalización Superior (OFS).
Al término de la asamblea se redactó un acta en donde se estipularon los acuerdos a que llegaron con la presencia de los pobladores, incluso el documento fue firmado y sellado por Pascual Romero.
Ya por último les preguntaron a los asistentes que, si estaban de acuerdo con la apertura de la presidencia, sin embargo, la respuesta fue negativa, pues le darán un plazo al presidente parta que aclare algunas inconformidades que fueron detectadas en la administración de los recursos.
Pero justo en el momento cuando pretendían sacarles copia a los documentos se hicieron de palabras los familiares del presidente con los vecinos y fue entonces cuando se dio la confrontación.
Ya por último los quejos reconocieron que las cosas se han empeorado, por lo que piden la renuncia de la autoridad.
