Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tlaxcala recomiendan adoptar hábitos saludables antes y durante el embarazo para reducir riesgos de diabetes gestacional y preeclampsia, que consisten en llevar una dieta equilibrada, variada y suficiente, basada en el “Plato del bien comer”, cuidando en todo momento el tamaño de las porciones.
En ese sentido, el coordinador de Salud Pública del Instituto, doctor Arquímedes Díaz Parra, informó que más de 90% de los casos de diabetes que complican un embarazo son de tipo gestacional, condición que en los últimos años aumentó en mujeres en edad fértil, por los cambios fisiológicos durante el embarazo.
Explicó que la diabetes gestacional eleva la glucosa en sangre y afecta a embarazadas que nunca padecieron la enfermedad, la cual se caracteriza por intolerancia a carbohidratos (glucosa) con diversos grados de severidad; se reconoce por primera vez en el embarazo y puede resolverse después del parto o quedar de manera permanente si no se atiende oportunamente.
El especialista del IMSS dijo que la diabetes pregestacional se puede desarrollar en pacientes con diagnóstico previo de la patología y aun así se embarazan. También se refirió a la preeclampsia, que es la elevación de la presión arterial después de la semana 20 de gestación o en el puerperio.
Si bien es cierto que no hay garantía para prevenir estas enfermedades, llevar un control prenatal cada mes, es de suma importancia para un diagnóstico y tratamiento oportuno que eviten complicaciones más graves que puedan poner en riesgo la salud de la madre y el bebé.
El doctor Arquímedes Díaz Parra subrayó que “entre los principales factores de riesgo para desarrollar diabetes gestacional se encuentran: padecer sobrepeso u obesidad, prediabetes, estilo de vida sedentario, antecedentes familiares de diabetes o haber padecido diabetes gestacional en un embarazo previo o por haber cursado síndrome de ovario poliquístico”.
Se recomienda que desde la preconcepción y durante el embarazo, las mujeres realicen actividad física moderada al menos 30 minutos al día, para mantener un peso adecuado de acuerdo con la etapa de gestación.
En caso de obtener un diagnóstico de diabetes gestacional, lo principal es mantener la calma y apegarse al tratamiento que recomiende el médico, generalmente se puede controlar con dieta y ejercicio; siguiendo las recomendaciones y vigilanciamédica después del nacimiento del bebé, a fin de regresar a los niveles previos al embarazo.
“Desde que la mujer confirma o sospecha de un posible embarazo, es necesario que programe una cita en el consultorio de Medicina Familiar que le corresponda, para iniciar el control prenatal de inmediato”, finalizó el coordinador de Salud Pública del IMSS.