Con el nuevo conflicto de cierre de las instalaciones de la dependencia de educación por parte de un grupo de sindicalizados, el titular del órgano de control interno, Edmundo Vázquez José, explicó que cuando él les solicitó a los empleados a su cargo ponerse a trabajar se inconformaron, y entonces emprendieron una protesta con el objetivo de que fuera destituido de ese cargo.
Desde el año pasado comenzaron con el conflicto, ya que los trabajadores de Secretaría de Educación Pública del Estado y la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (Sepe-Uset) fue originado cuando a los quejosos se les pidió cumplir con sus responsabilidades laborales.
Tras la exigencia de pedirles resultados en los puestos que desempeñan fue lo que desató la inconformidad, y a eso se sumaron otros temas; fue entonces que señalaron al funcionario público que prepotente y déspota, e incluso con acciones de acoso laboral, que aprovecharon para generar presión a la autoridad educativa.
El representante lamentó la decisión de la delegada sindical de “solapar” las actitudes de falta de compromiso con el trabajo por parte de sus representados, en vez de ofrecer estrategias que permitan impulsar el desarrollo de la educación de la niñez y la juventud tlaxcalteca.
A pasado año y medio de su llegada y desde entonces vio muchas anomalías, en donde ningún expediente ha sido terminado y destacó que con el cierre de las oficinas del órgano de control interno quedaron en su interior muchos documentos que no pueden ser motivo de trámites, obstaculizando así el cumplimiento de las funciones de dicha área de contraloría.
Trabajadores de la SEPE les pidieron que se pongan a trabajar y se fueron a paro
