Ante la falta de ideales y por presuntamente ser víctima de violencia política, la diputada local Blanca Águila Lima renunció este día a las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
En rueda de prensa, de manera sorpresiva la congresista presentó su renuncia al trabajo como militante del tricolor.
Reconoció que a pesar de que se trata de una difícil decisión, no tuvo otra alternativa, ya que, durante los últimos años en el partido “he visto con decepción cómo mi capital político, fruto del respaldo y la confianza de la ciudadanía ha sido relegado. Las decisiones que el partido ha tomado en diferentes momentos han estado alejadas de los principios que alguna vez nos guiaron y han ignorado las verdaderas necesidades de la militancia y de la sociedad a la que juramos servir. Se han tomado caminos que considero erróneos, alejados de los ideales de justicia social y progreso que defendemos”, sentenció.
Asimismo, dijo que fue víctima de violencia política, ya que enfrentó ataques que “no solo han buscado menoscabar mi trabajo y mi integridad, sino que representan una afrenta a todas las mujeres que luchan por un espacio en la vida pública”, mencionó.
Agregó que abandona el partido con la frente en alto y con profundo agradecimiento, “sabiendo que he actuado con principios, convicciones y, sobre todo, mucha congruencia. La política debe estar al servicio del pueblo y de los valores que nos unen, no de los intereses particulares. A partir de hoy, caminaré con libertad, buscando siempre lo mejor para mi comunidad y para el estado de Tlaxcala y manteniendo mi postura crítica y reflexiva que me ha caracterizado”, puntualizó.
Agradeció el respaldo de su equipo de trabajo en esta decisión difícil y aclaró que aún no se integrará a ningún partido político “pero siempre he tenido invitaciones porque la gente sabe de mi trabajo”.
Sin embargo, por el momento se enfocará a su trabajo legislativo y a rendir resultados favorables a favor de la ciudadanía.
