La molestia creció aún más cuando, tras la detención de un presunto ladrón por parte de vecinos, la presidenta municipal declaró públicamente que Xiloxoxtla era el municipio más seguro de la entidad.
El municipio de Xiloxoxtla atraviesa una crisis de inseguridad y descontento ciudadano, mientras la administración local enfrenta severas críticas por su falta de acción.
Desde el inicio de la gestión, las demandas de la población han sido ignoradas, y el Ayuntamiento, según denuncias, está controlado por un grupo ajeno al municipio, dejando sin avances significativos a la comunidad.
En medio de esta situación, la alcaldesa Yazmín Jiménez Rugerio fue vista celebrando en la fiesta de cumpleaños de la gobernadora del estado, lo que generó indignación entre los ciudadanos.
La molestia creció aún más cuando, tras la detención de un presunto ladrón por parte de vecinos, la presidenta municipal declaró públicamente que Xiloxoxtla era el municipio más seguro de la entidad, una afirmación que fue ampliamente cuestionada.
Además, recientemente trascendió que la alcaldesa ha estado despidiendo a empleados que no cumplen con una supuesta cuota económica, lo que ha sido señalado como una posible venta de puestos dentro del Ayuntamiento. Este tipo de prácticas no solo representarían un acto de corrupción, sino que también estarían afectando la eficiencia del gobierno municipal, al permitir que cargos clave sean ocupados por personas sin el perfil adecuado.
Ante este panorama, los habitantes de Xiloxoxtla exigen transparencia, seguridad y una administración basada en el mérito y no en el autoritarismo.
La indignación crece mientras las promesas de campaña siguen sin cumplirse y la crisis de gobernabilidad se profundiza.