En la realidad, no se ha registrado ninguna intervención efectiva de su parte para resolver esta problemática ambiental
Durante la visita de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, la presidenta municipal de Xiloxoxtla, Yazmín Jiménez Rugerio, destacó su preocupación por el saneamiento de cuerpos de agua, pero todo se trató de una farsa. Porque en la práctica, no ha tomado medidas efectivas y se niega apoyar para sanear los mantos acuíferos; le gana la tentación por hacer bisnes.
A pesar de que ha sido vista en la zona, la mayoría de las veces solo se le observa posando para fotos, sin que haya acciones o estrategias claras para abordar el saneamiento de los espejos de agua. En la realidad, no se ha registrado ninguna intervención efectiva de su parte para resolver esta problemática ambiental, lo que genera dudas sobre el verdadero interés en la conservación del ecosistema.
Por otro lado, la regidora de Xiloxoxtla, Beatriz Serrano, parece tener otras prioridades. En lugar de enfocarse en el saneamiento, ha estado más interesada en promover los intereses de su cuñado y una persona que supuestamente posee una constructora.
Ello debido a que esta persona ha manifestado su interés en usar maquinaria para mañosa y aparentemente sanear cuerpos de agua, pero muchos en la comunidad señalan que este proyecto responde más a intereses económicos y partidistas que a una auténtica preocupación por el medio ambiente, ya que se quieren enriquecer fingiendo acciones a favor de la naturaleza.
Por si fuera poco, la Asociación Civil Patos Verdes, que se presenta como defensora de la laguna de Acuitlapilco, también ha sido acusada de no cumplir con las acciones prometidas. A pesar de hacer públicas sus intenciones de promover el saneamiento, en los hechos no se ha evidenciado ninguna intervención real.
Su representante, Raymundo Serrano, ha sido señalado por buscar protagonismo y por su aparente interés en obtener poder dentro de la comunidad, más que en el bienestar del ecosistema de la laguna.
Además, se ha reportado que la asociación ha obtenido beneficios económicos a través de la colocación de puestos de venta de comida en la zona, lo que genera sospechas sobre la verdadera motivación detrás de sus acciones. Mientras tanto, la Laguna de Acuitlapilco sigue sin recibir las inversiones necesarias para su recuperación y conservación.
De esta manera, tanto las autoridades locales como las organizaciones involucradas parecen más preocupadas por intereses personales y económicos que por el bienestar del medio ambiente, lo que deja a la comunidad y a la laguna en una situación de abandono y desprotección.
