«¡Don Saúl es inocente!»: Protestan en Tlaxcala por libertad de defensor del bosque sentenciado a 20 años

 

Saúl Rosales fue detenido en julio de 2022, acusado de participar en el linchamiento.

 

 

 

La mañana de este martes, vecinos y familiares de Saúl Rosales Meléndez, líder comunitario de San Pedro Tlalcuapan, bloquearon el Libramiento Apizaco Huamantla a la altura de Ciudad Judicial, para exigir su inmediata liberación.

El bloqueo se llevó a cabo en ambos sentidos de la vialidad, afectando el tránsito vehicular por varias horas. Los manifestantes portaban pancartas, lanzaban consignas y exigían justicia para quien consideran un preso político.

“¡Don Saúl es inocente!”, “¡Presos por defender la tierra!” y “¡Libertad ya!”, fueron algunas de las consignas que se escucharon frente al complejo judicial, donde acusaron a las autoridades estatales de criminalizar a Rosales por su labor en defensa del bosque y de los derechos comunitarios.

Saúl Rosales fue detenido en julio de 2022, acusado de participar en el linchamiento de un joven ocurrido el 15 de abril de ese mismo año, durante el Viernes Santo, en la comunidad de Tlalcuapan. Las autoridades lo vincularon al delito de homicidio calificado, a pesar de que su defensa asegura que no hay pruebas que lo señalen directamente y que ni siquiera estuvo presente durante los hechos.

El pasado mes de julio de 2025, el Juez de Control dictó una sentencia de 20 años de prisión contra Rosales, generando indignación entre sus vecinos, defensores de derechos humanos y organizaciones civiles, quienes denuncian irregularidades en el proceso y una evidente criminalización por su papel como líder indígena y defensor del medio ambiente.

En declaraciones pasadas, colectivos como el Frente en Defensa del Bosque de Tlaxcala y medios como Pie de Página han alertado que tanto Rosales como Raymundo Cahuantzi —otro líder comunitario también detenido— han sido víctimas de una criminalización sistemática por parte del Estado.

Durante la protesta, los familiares de Saúl reiteraron que se han presentado pruebas que acreditan su inocencia, sin que estas hayan sido debidamente valoradas por el Poder Judicial. Aseguran que su encarcelamiento representa no solo una injusticia individual, sino un golpe a toda la comunidad que busca vivir en paz y proteger sus recursos naturales.

“Nos están mandando el mensaje de que defender el bosque es un delito”, dijo una de las manifestantes. “Pero no nos vamos a quedar callados. Vamos a seguir luchando hasta que Saúl esté libre”, concluyeron.