Una joven colombiana, identificada como Vane, denunció en redes sociales que su cita la abandonó en un restaurante después de que ella dejara claro que no quería tener intimidad con él.
El hombre, quien había pedido un churrasco y una Coca-Cola, aplicó la clásica de “voy al baño”… y nunca regresó, dejándola con toda la cuenta.
“Como yo no quise entregar esa piel, el man me aplicó la del ‘ya vengo’ y se marchó, y a su barco le llamó libertad”, relató la joven con humor e indignación.
El caso encendió el debate en redes: ¿una invitación a comer genera alguna obligación sentimental? La mayoría coincide en que no, y que cada quien debe responder por lo que consume y respetar los límites del otro.
La anécdota rápidamente se hizo viral, mostrando cómo las citas en tiempos de redes sociales siguen dando mucho de qué hablar.