La tradicional puesta de ofrendas sigue viva en Tlaxcala, donde miles de familias continúan honrando a sus seres queridos que ya fallecieron. En los hogares tlaxcaltecas, los altares se llenan de color, flores de cempasúchil, veladoras, pan de muerto y los alimentos preferidos de quienes se adelantaron en el camino.
En el mercado Emilio Sánchez Piedras, las ventas de productos de temporada se mantienen activas, ofreciendo a los visitantes una amplia variedad de dulces típicos, calaveritas de chocolate, incienso, pan y demás artículos necesarios para las ofrendas. Los comerciantes destacan que esta tradición no solo preserva las costumbres, sino que también fortalece los lazos familiares y la identidad cultural de Tlaxcala.
Fotografías y Texto: Fabiola Márquez//Agencia- TlaxcalaRoja
