La creciente inseguridad en el municipio de Tlaxcala persiste, sin que las autoridades locales, encabezadas por el alcalde Alfonso Sánchez García, logren frenar la ola de delincuencia.
Lo anterior luego de que la mañana del sábado 14 de diciembre, un repartidor de pan fue asaltado con violencia mientras realizaba entregas en la comunidad de San Esteban Tizatlán, una de las zonas más afectadas por la inseguridad.
De acuerdo con el reporte de emergencias 911, el asalto ocurrió alrededor de las 7:15 horas en la calle Sor Juana Inés de la Cruz. La víctima fue interceptada por dos individuos, uno de ellos armado, quienes lo obligaron a caminar hacia una zona aislada, buscando evitar que pudiera resistirse o alertar a las autoridades.
Los delincuentes, descritos como jóvenes con sudaderas de colores gris y negra, huyeron a bordo de la camioneta de trabajo de la víctima, una Nissan roja con caja seca blanca, modelo 2012. Para evitar que el repartidor pudiera dar aviso a la policía, le arrebataron su teléfono celular antes de escapar.
La víctima presentó su denuncia formal ante la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), quien ha iniciado las investigaciones correspondientes.
Este nuevo incidente se suma a una larga lista de hechos delictivos que evidencian la incapacidad del gobierno municipal, encabezado por Alfonso Sánchez García, para frenar la inseguridad que afecta a los habitantes de Tlaxcala. La comunidad sigue pidiendo mayores acciones y resultados concretos en materia de seguridad, ante el creciente temor por la violencia que afecta a los ciudadanos.