Vigilantes privados asignados a hospitales públicos de Tlaxcala, contratados por TRUST denunciaron la falta de pago de sus salarios y presuntas amenazas por parte de sus superiores.
De acuerdo con los afectados, hasta la tarde de este jueves 20 de febrero no habían recibido el sueldo correspondiente a dos meses de trabajo. Además, señalaron que supervisores de la compañía los presionan para no ventilar la situación, advirtiéndoles que podrían ser despedidos sin liquidación si lo hacen.
Ante esta problemática, los trabajadores solicitaron la intervención de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros para frenar lo que consideran un acto de injusticia que afecta a hombres y mujeres que laboran para sostener a sus familias.