El municipio ha sido marcado por la inestabilidad y se ha convertido en un “foco rojo” del crimen organizado, donde operan robos, extorsiones, huachicol y otros delitos que el gobierno local no ha logrado frenar.
Ixtacuixtla vive un grave colapso en materia de seguridad. Ayer seis cabezas humanas fueron localizadas en diferentes puntos del municipio, dejando en evidencia la incapacidad del alcalde Alberto Hernández Olivares para controlar la violencia que azota la localidad.
A pesar de que Hernández Olivares aseguró que se ha redoblado la vigilancia y que no permitirán que la inseguridad lo rebase, los hechos demuestran lo contrario. El municipio ha sido marcado por la inestabilidad y se ha convertido en un “foco rojo” del crimen organizado, donde operan robos, extorsiones, huachicol y otros delitos que el gobierno local no ha logrado frenar.
Vecinos coinciden en que la administración del alcalde ha mostrado falta de estrategia y control, mientras la delincuencia sigue aumentando, generando temor e incertidumbre entre la población.
La ciudadanía señala que, lejos de brindar soluciones, Hernández Olivares ha sido incapaz de implementar medidas efectivas que frenen la ola de violencia que amenaza la vida diaria de los habitantes de esa demarcación.