Feria de Tlaxcala 2025: “Gratis”, pero con zona VIP de casi $3 mil — el negocio millonario de Copy Nava

 

La altanera, prepotente y arribista presidenta del patronato se les ocurrió la flamante idea de habilitar una “zona VIP” a cambio de casi $2,860 pesos por mesa, replicando la cuestionada estrategia del Teatro del Pueblo de Puebla.

 

 

 

Aunque el Patronato de Feria de Tlaxcala 2025 encabezado por Rosa Elena Nava García Méndez, presume que los conciertos del Teatro del Pueblo serán de acceso gratuito, la realidad es muy distinta. Este año, se aventaron la puntada de cobrar lo que se supone es un evento gratuito dirigido para el pueblo.

Por lo que la altanera, prepotente y arribista presidenta del patronato se les ocurrió la flamante idea de habilitar una “zona VIP” a cambio de casi $2,860 pesos por mesa, replicando la cuestionada estrategia del Teatro del Pueblo de Puebla.

El discurso oficial de “eventos para todos” se derrumba cuando los ciudadanos descubren que solo quienes paguen podrán disfrutar de los artistas de cerca, mientras que el público general deberá conformarse con ver desde lejos, entre empujones, rejas y filtros de seguridad.

El Patronato,vuelve a demostrar que la feria más importante del estado se ha convertido en un negocio privado disfrazado de tradición popular.

A pesar de que se financia con recursos públicos y con los altos cobros del estacionamiento, ahora los organizadores buscan seguir lucrando con la ilusión del “acceso gratuito”.

Las mesas VIP incluirán, según se anunció, baños privados, seguridad exclusiva y barra de bebidas, un lujo que contrasta con el malestar de los visitantes que apenas encuentran lugar donde sentarse o estacionarse sin pagar tarifas abusivas.

“Dicen que es gratis, pero todo cuesta: el estacionamiento, las zonas restringidas, hasta el acceso visual”, reclamaron asistentes en redes sociales tras conocerse la modalidad de los conciertos.

El colmo de esta nueva postura es que el patronato no se conforma y no tiene llenadera toda vez que a pesar de que cobran todos los servicios de la celebración, ahora han montado esta nueva estrategia para seguir engrosando los bolsillos de los responsables directos e indirectos de esta celebración, lo que ha generado fuertes críticas hacia lo que muchos consideran una feria elitista y excluyente.

Lejos de ser una celebración del pueblo, la Feria de Tlaxcala 2025 parece consolidarse como un escaparate de privilegios, donde solo quien puede pagar disfruta, y el resto —los verdaderos tlaxcaltecas— quedan fuera, mirando desde la valla.