/ Dentro de la SMyT se dio a conocer que el director de transporte, Carlos López Suárez, estaría realizando jugosos negocios dentro de la dependencia estatal, además de tener como delegado a su yerno, Moisés Grimaldo Galán, en el municipio de Chiautempan.
Resulta que López Suárez, además de ser vividor del erario público, también es concesionario y tienen asignado el número de placa A705WWA dentro del padrón de servicio público del estado, es decir es juez y parte, como quien dice se cobra y se paga los refrendos.
Actualmente gana 16 mil pesos quincenales, y al decir de los propios empleados, no realiza el trabajo que le corresponde, además de ingresar todos los días jugosas ganancias por los distintos servicios que se ofertan en la Secretaria de Movilidad y Transporte.
A la par señalan a la responsable de transparencia, Mirian Martínez Morales, quien se encarga de maquillar las cifras para evitar que su jefe sea descubierto por corrupción y se delate el “chiquero” que tienen a contentillo del propio titular de la dependencia.
A todo lo anterior, hay que sumarle que López Suárez, se ha encargado de hacer a un lado todo aquel funcionario que no comparta sus ideas, incluso bajo amenazas son obligados a guarda silencio.
Este personaje es el mismo que fungía como jefe del departamento de ingeniería del transporte, el que tenía que realizar estudios para fijar los precios del aumento del pasaje como lo fundamenta el Articulo 18. Sin embargo, a la fecha siguen los conflictos por los abusos de los concesionarios, no hay Ley y mucho menos capacidad de la SMyT.