El ícono de la música romántica mostró su profesionalismo al recuperarse y seguir con el espectáculo.
Ciudad de México: Este fin de semanas, miles de fanáticos se congregaron en la Arena Ciudad de México para presenciar el sexto concierto de Luis Miguel, quien ofreció una noche llena de éxitos de los años 90. Sin embargo, el cantante mexicano llamó la atención de todos por un inesperado incidente que ocurrió en pleno escenario.
El espectáculo transcurría con normalidad mientras Luis Miguel entonaba clásicos como “Palabra de Honor”, “Suave” y “Ahora te puedes marchar”, acompañado por la efusión de sus seguidores. Tras una emotiva interpretación de “La Bikina” junto al mariachi, el artista intentó alcanzar un vaso de agua mientras cantaba “La Incondicional” para refrescar su voz, pero en un desafortunado giro de eventos, terminó empujando el recipiente y derramando agua en el escenario.
Los fans presentes notaron el incidente, pero en un gesto de admiración y respeto, decidieron pasar por alto el percance y continuaron coreando las letras de sus canciones favoritas. Sin embargo, la sorpresa mayor estaba por venir.
Después de dedicar una de sus emotivas canciones a las mujeres mexicanas, Luis Miguel resbaló y cayó al suelo. El público quedó momentáneamente en silencio, pero las luces se apagaron rápidamente para ocultar el incidente en la oscuridad. Sin embargo, la oscuridad no duró mucho tiempo, ya que el icónico intérprete reapareció con los brazos abiertos, decidido a continuar el espectáculo.
En un acto de profesionalismo impresionante, Luis Miguel permaneció en el suelo mientras sus músicos comenzaron a tocar el intro de “Te propongo esta noche”. Desde el suelo, entonó algunas estrofas y, con fuerza y determinación, se levantó para seguir con sus característicos movimientos de cadera, demostrando que sigue siendo “El Rey” en el escenario.
Después de retomar su actuación con éxito, el cantante solicitó a su equipo que se asegurara de secar bien las áreas donde había resbalado, incluso marcando con señales las zonas aún húmedas. El público aplaudió su valentía y determinación, consolidando su estatus como uno de los grandes intérpretes de la música en español. A pesar de los percances, la noche quedará marcada en la memoria de sus fans como un testimonio de la dedicación y pasión de Luis Miguel por su música y su público.
