Chamaquean al Secretario de Turismo de Tlaxcala, Fabricio Mena y le r0b4n su dinero 

El Secretario de Turismo de Tlaxcala, Fabricio Mena, y su familia fueron víctimas de una presunta estafa por parte de una agencia de viajes de Puebla, que les prometió un crucero y alojamiento para sus vacaciones, pero no cumplió con lo acordado. Actualmente, se encuentran varados en Barcelona, España, donde, según se infiere, planeaban pasar el fin de año.

La denuncia fue dada a conocer a través de un video en la red social TikTok, subido por un miembro de la familia Mena.

En el clip, que rápidamente se viralizó, se observa a Fabricio Mena mientras se menciona la situación en la que se encuentran.

Lo que hace aún más llamativa la denuncia es que Fabricio Mena es el titular de la Secretaría de Turismo de Tlaxcala, lo que genera una contradicción dada su experiencia y conocimiento en el área. Como funcionario encargado de promover y regular el turismo en el estado, su involucramiento en una estafa de este tipo ha levantado interrogantes sobre su capacidad para investigar y seleccionar adecuadamente a las agencias con las que decide hacer negocios, tanto a nivel personal como institucional.

Este incidente ha generado críticas en redes sociales, ya que, en su rol como experto en el sector turístico, se esperaba que el Secretario Mena hubiera tomado las precauciones necesarias al contratar los servicios de esta agencia de viajes.

Por lo que lo sucedido evidencia su falta de experiencia y capacidad para atender temas en materia de agencia de viajes y de turismo estatal, nacional e internacional.

Además, la situación ha suscitado dudas sobre su gestión al frente de la Secretaría de Turismo de Tlaxcala, poniendo en entredicho su capacidad para supervisar la calidad de los servicios turísticos en la entidad.

Se espera que el funcionario afectado tome medidas legales contra la empresa, a fin de evitar que más personas sean víctimas de fraudes similares.

Este escándalo ha puesto en evidencia los riesgos de confiar en empresas de turismo sin una adecuada verificación, incluso cuando los propios funcionarios gubernamentales están involucrados.