Ciudadanos de la localidad pidieron a la presidenta municipal de Tlaxcala, Yazmín Jiménez Rugerio, que tome cartas en el asunto y ponga orden en su administración, en particular en lo que respecta a sus colaboradores más cercanos, como son sus asesores.
Los habitantes acusaron a estos funcionarios de involucrarse en situaciones graves que están afectando la imagen y el funcionamiento del gobierno municipal.
Según las denuncias de los ciudadanos, los asesores de la presidenta estarían incidiendo directamente en un problema serio que ahora recae sobre los hombros de Jiménez Rugerio: acusaciones de extorsión y acoso laboral dentro del Ayuntamiento.
Los trabajadores municipales señalaron que están siendo extorsionados por algunos asesores, quienes les exigen pagos bajo la amenaza de perder sus empleos, lo que han calificado como una práctica de extorsión descarada para asegurar su permanencia laboral.
Los pobladores también expresaron su preocupación por el comportamiento de estos asesores, afirmando que están al tanto de las implicaciones legales de sus actos o, en su defecto, están actuando con total desdén hacia la ley.
Ante estos hechos, los ciudadanos hicieron un llamado a los trabajadores del Ayuntamiento a interponer las denuncias correspondientes ante las autoridades competentes, como la Fiscalía, el Tribunal y la Comisión de Derechos Humanos.
La denuncia pública también subraya la inconformidad de los ciudadanos ante la presencia de personas externas al municipio, quienes, según ellos, estarían tomando decisiones y humillando a los habitantes de la localidad, algo que consideran inaceptable.
Los ciudadanos exigen que la presidenta Yazmín Jiménez Rugerio se haga responsable de la situación y tome las medidas necesarias para poner fin a estos abusos, asegurando que los derechos de los trabajadores y la integridad de la administración municipal sean respetados en todo momento.
La comunidad pide que se recupere el orden y la transparencia en el gobierno municipal, para evitar que estos problemas sigan dañando la confianza y el bienestar de los habitantes de Tlaxcala.
