En Tlaxcala, la restauración de imágenes religiosas requiere técnica y delicadeza, especialmente para igualar más de 20 tonalidades y conservar los colores originales. Natalie, restauradora con cinco años de experiencia, señala que muchas imágenes quebradas o quemadas sí tienen arreglo, siempre que se trabaje con cuidado en detalles como el rostro y las manos. Destaca que son pocas las mujeres dedicadas a este oficio, donde la fe y el compromiso son fundamentales.
Fotografías y Texto: Fabiola Márquez//Agencia- TlaxcalaRoja
